miércoles, 6 de abril de 2011

Estudio de fuentes y manantiales en cuenca media Júcar y Cabriel‏

Al menos el 11% de las más de 800 fuentes y manantiales inventariados en las cuencas medias de los ríos Júcar y Cabriel se han secado en los últimos 40 años. La Oficina de Planificación Hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) adjudicó a un equipo de la UCLM formado por los profesores Gregorio López Sanz, Rafael Molina Cantos, Miguel Ángel Fernández Graciani y Fernando Pérez del Olmo un contrato de asistencia técnica con el fin de realizar un “Estudio de fuentes, manantiales y pequeños espacios del agua en la cuenca media de los ríos Júcar y Cabriel”. El trabajo se desarrolló entre julio de 2009 y julio de 2010, y ya es de conocimiento público. Para consultar o descargar el informe final de 285 páginas así como las fichas individualizadas para cada una de las 75 fuentes estudiadas con más detalle, pueden seguirse los siguientes enlaces web: - Informe final (archivo pdf de 3 MB) (pinchar aquí): http://www.uclm.es/profesorado/glopez/pdf/estudiojucar/INFORME%20FINAL.%20Estudio%20de%20fuentes%20y%20manantiales%20_23-7-2010_.pdf - Fichas individualizadas. 75 fuentes de diferentes municipios (pdf) (pinchar aquí): http://www.uclm.es/profesorado/glopez/estudiojucar.asp El territorio objeto de estudio se ha extendido entre la cabecera de los embalses de Alarcón y Contreras y la confluencia de los ríos Júcar y Cabriel en Cofrentes, sobre unos 107 municipios cuyos términos municipales están total o parcialmente dentro del área de estudio, y una superficie total de 12.171 km2 en las provincias de Albacete, Cuenca y Valencia. El estudio se ha desarrollado a través de una metodología que combina el trabajo de campo con la búsqueda y contraste de información a partir de otras fuentes documentales. Se ha recabado la información disponible sobre los diferentes espacios del agua acudiendo a las comunidades que históricamente han vivido en su entorno, haciendo especial hincapié en los usos tradicionales que las personas del lugar han realizado a partir de dichas fuentes. En el ámbito de estudio se han contabilizado un total de 801 fuentes o manantiales, de los cuales se han alcanzado a visitar 379 de ellos a lo largo de un período de 1 año. Las subcuencas con más fuentes inventariadas por km2 son la 072. Río Júcar entre las confluencias con el río Reconque y el río Cabriel (0,67), la 065. Rambla de Carcelén y la confluencia con el río Júcar (0,49) y 090. Rambla San Pedro (0,46). La mayor ratio de fuentes secas sobre las inventariadas se presenta en las masas de agua subterránea 080.135 Hoces del Cabriel (19%) y 080.129 Mancha Oriental (13%). La mayor ratio de fuentes secas sobre las inventariadas (descartando los municipios con menos de 5 fuentes) se presenta en Cenizate (100%), Villalpardo (53%), Golosalvo (60%) y Enguídanos (40%). En 34 de los 107 municipios no se han detectado fuentes. Los municipios con más fuentes inventariadas por km2 son Alatoz (0,86), Villatoya (0,48) y Villalpardo (0,48). Por contra, respecto a los municipios cuyo término municipal está comprendido en su mayor parte en la zona de estudio y que cuentan con fuentes en sus términos municipales, los que presentan un menor número de fuentes inventariadas por km2 son Albacete, Barrax y Casas de Juan Núñez, con un promedio de 0,01 fuente/km2. Los importantes bombeos de la agricultura de regadío de La Mancha Oriental son los responsables de que los niveles piezométricos de la masa de agua subterránea 080.129 hayan caído una media de 50 metros desde mediados de la década de los años 70 del siglo XX. El acuífero de las Hoces del Cabriel, además de verse afectado por la caída de niveles piezométricos del acuífero Mancha Oriental, también ha experimentado un aumento relevante de los bombeos ligados a la explotación de pozos para el riego de la viña. Según los datos de pluviometría desde 1940 hasta la actualidad, las precipitaciones en la zona de estudio han experimentado una reducción moderada en términos cuantitativos. Haciendo la media de una serie de pluviómetros representativos, se obtiene que en el período 1991-2007 las precipitaciones han sido por término medio un 6,84% inferiores a las del período 1940-2007. De ello cabe concluir que el secado de multitud de fuentes o la merma sustancial de su caudal no cabe achacarlo a la reducción moderada de las precipitaciones que ha tenido lugar. La recuperación del funcionamiento hidrológico natural de todas aquellas fuentes afectadas por el descenso de niveles piezométricos pasa necesariamente por implementar políticas con el fin de frenar e invertir dicha tendencia. Es preciso revitalizar los sistemas de producción y distribución de alimentos y mercancías de ámbito local, impulsando una agricultura que recupere su función tradicional de ser generadora neta de energía (balance energético positivo) y utilice con mesura recursos naturales como el suelo fértil y el agua. Evidentemente, esta transformación pasa por la puesta en valor de sistemas de cultivo en secano, de semillas autóctonas y sistemas de riego tradicionales (hoy abandonados), en resumen, por la adecuada valoración social del esfuerzo de las gentes del campo.

jueves, 10 de marzo de 2011

SENTENCIA DECLARA ILEGAL LA MEDIA VEDA

En el año 2007 Ecologistas en Acción interpuso un recurso contencioso administrativo, el nº 776/07, contra la autorización de determinadas prácticas cinegéticas y preceptos recogidos en la orden de vedas de la temporada 2007-2008.
Entre ellos destaca la denuncia de la ilegalidad de la media veda. A este respecto, el Tribunal declara ilegal esta práctica cinegética que se realiza todos los años entre el 15 de agosto y el 15 de septiembre y que afecta a las especies paloma torcaz, tórtola común y codorniz.
Se estima plenamente en este tema la demanda de Ecologistas en Acción, por no existir ningún dato que acredite que “la densidad de las poblaciones (de las especies que se cazan en media veda) permita su aprovechamiento sostenible” ni informe que acredite por parte de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente que “la fijación de estos períodos se realice de acuerdo con el ciclo biológico de las especies y su fenología provincial”.
Al contrario, de forma contundente la sentencia da por válidos los peritajes aportados por Ecologistas en Acción y que demuestran que, en contra de la normativa europea y estatal vigente, el período hábil de caza de la codorniz, tórtola común y paloma torcaz en la media veda coincide con la fase final de la época de reproducción de estas especies en Castilla-La Mancha. Y que en el caso concreto de la tórtola común y de la codorniz el estado de las poblaciones no permite un aprovechamiento cinegético sostenible.
Ecologistas en Acción considera que esta sentencia tiene una notable importancia por cuanto debe conducir a la desaparición de la media veda y ya es firme en este aspecto. Una modalidad cinegética que no sólo es ilegal e insostenible sino que da lugar todos los años a un incremento muy notable de caza furtiva de especies protegidas. Durante la media veda es la época del año cuando más rapaces y otras especies protegidas son abatidas por disparos de cazadores desaprensivos.
Ecologistas en Acción se ha dirigido a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente solicitando que las disposiciones firmes de la sentencia se incorporen a la nueva orden de vedas actualmente en fase de elaboración.
Por otra parte, el Tribunal también declara nula de pleno derecho la corrección de errores publicada en el D.O.C.M. nº 173, de 20 de agosto de 2007 por la que se ampliaba el cupo de piezas cazables en los terrenos libres. De nuevo el Tribunal admite plenamente los postulados de esta asociación reconociendo que lo que se ocultaba tras la apariencia de una corrección era en realidad una modificación sustancial de la orden de vedas a la que se hurtó de una adecuada tramitación administrativa.
Finalmente, el Tribunal inadmite la parte del recurso de Ecologistas en Acción contra la práctica de la perdiz con reclamo, pues señala que no se ha acreditado que sea contraria a la normativa interna o comunitaria. Pero esta cuestión esperamos sea corregida en el Tribunal Supremo ante el cual hemos interpuesto recurso de casación por este motivo concreto.
Ecologistas en Acción es consciente de la trascendencia que tiene la sentencia que declara ilegal la media veda y de las posibles consecuencias que se pueden derivar de su obligada aplicación. Por ello, desde la asociación se ha ofrecido a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente la oportunidad de tratar donde, con quién y cuando crea oportuno la mejor manera de trasladar a la nueva orden de vedas las cuestiones legales suscitadas en la misma.

http://www.ecologistasenaccion.org/IMG/pdf/Recurso_776_07_SENTENCIA_NOT_4-2-11.pdf

domingo, 20 de febrero de 2011


CONTROL DE DEPREDADORES ACEM (Asociación para la conservación de los ecosistemas de la Manchuela) - Ecologistas en Acción de la Manchuela


Un año más desde nuestra Asociación ACEM - Ecologistas en Acción de la Manchuela, nos preguntamos sí como cada año, con el comienzo de la primavera, veremos nuestros campos y montes llenos de lazos y trampas para capturar depredadores autorizados por la Administración. Un año más, nos volvemos a preguntar si se seguirán autorizando de forma general para todos los cotos que lo soliciten, sin los estudios previos que los justifiquen. El año pasado enviamos escrito a la Delegación Provincial de Agricultura y Medio Ambiente, cuestionando como era posible que se autorizasen métodos de control de depredadores en muchos de los cotos de nuestra provincia por daños a las especies cinegéticas, y a la vez la sobrepoblación de conejos (“especie cinegética”) causaba y causa en la actualidad perjuicios en la agricultura, se trataba pues de una situación paradójica. En nuestro escrito solicitábamos que de cara a años futuros se reconsiderasen estas autorizaciones. No obtuvimos respuesta, y por ello volvemos a preguntar.
El control de los depredadores en el medio natural es uno de los temas más controvertidos de la gestión cinegética. Además de los motivos éticos que se pueden plantear al matar animales salvajes por intereses lúdicos o deportivos, en numerosos estudios, incluso ligados al ámbito cinegético, se niega el impacto negativo sobre las especies cinegéticas de los predadores naturales. La depredación es un proceso natural que existe en todos los ecosistemas naturales, su efecto más obvio es la muerte de parte de la población de sus presas, pero existen otros efectos positivos que muchas veces pasan desapercibidos. Los depredadores son una parte de los ecosistemas indispensable que contribuye al necesario equilibrio ecológico, es bien conocido que los depredadores eliminan de forma selectiva los individuos enfermos, con deformidades o peor adaptados a las condiciones del medio, de manera que el resto de los individuos se ven beneficiados por una menor competencia, o que la depredación contribuye a evitar la sobrepoblación de determinadas presas, como es el caso actual de conejos, o que así, también pueden tener efectos beneficiosos indirectos sobre la vegetación. En definitiva, no es cierto que haya que controlar los depredadores para que estos no terminen con las especies cinegéticas. Que los cazadores perciban la depredación como un grave problema, (una apreciación subjetiva de un colectivo reducido de personas, que se quejan de que hay demasiados zorros, aguilas, alimañas que matan a las especies cinegéticas), se debe a la falta de percepción, y a la dificultad de actuar sobre otros factores, como la degradación y pérdida de hábitat, determinadas prácticas agrícolas, enfermedades, condiciones climáticas adversas, o bien a las actuaciones de los propios gestores cinegéticos, como la caza excesiva, o la introducción de híbridos y fomento industrial de piezas de caza menor procedentes de repoblaciones procedentes de granjas.
Hasta la fecha, las autorizaciones de control de depredadores entendemos que se han estado concediendo sin los estudios previos que las justifiquen, para eliminar a las especies consideradas como competidoras, en aras de una determinada de la práctica “deportiva” o de ocio. Con ello, se esta incidiendo profundamente sobre una parte de la fauna, (los carnívoros), que habitan en nuestros ecosistemas, y sobre las estructuras ecológicas existentes, osea desnaturalizando más el medio natural. Así, nos volvemos a preguntar, como puede ser el propio sector cinegético, que con el objetivo de conseguir unos cotos repletos de perdices es en parte responsable de los desequilibrios del medio natural, como puede entonces asumir la responsabilidad del control de depredores. Alguien puede creerse que los lazos son revisados diariamente, o que si cae una especie no objeto, protegida, no va a ser sacrificada.
En nuestro escrito del año pasado pedimos, y volvemos a pedir ahora a la Delegación de Agricultura y Medio Ambiente, una visión amplia que tenga como centro la salud ambiental de nuestro medio, y no únicamente la multiplicación a ultranza de determinadas especies cinegéticas, considerando que las Delegaciones Provinciales solo deberían autorizar el control de depredadores con carácter excepcional y previa comprobación de su necesidad, y descartando los métodos menos selectivos, como el lazo en Alar, cuestionado incluso en el ámbito cinegético. No podemos olvidar que los carnívoros son elementos fundamentales de los habitats, y que los estudios previos a una autorización de control de depredadores deben recoger variables como la densidad de predadores, relaciones depredadores–presas, estudio de la dieta de los depredadores de la zona en cuestión, relaciones entre especies predadores naturales, existencia en el terreno de especies protegidas que pudieran caer en las trampas, y si los medios utilizados realmente reducen el “problema”.
Cuando se habla de control de la predación pocas veces –o ninguna- se tiene en cuenta que el depredador más efectivo con diferencia presente en los cotos de caza, es precisamente el propio cazador. A nuestro entender debido a la evidente incidencia que producen la caza y la gestión de la misma en el medio natural, el control de la depredación debe empezar por el control real y efectivo de la actividad cinegética, con no exceder en número de cazadores e intervenciones la capacidad de los ecosistemas, con la presencia en el monte de un número realista de personal debidamente preparado que supervise las acciones y omisiones del colectivo cazador, con periodos de vedas mas largos, eliminación de la media veda.....
Una vez más insistimos en solicitar rigor a la hora de autorizar métodos de control depredadores, y que ante las posibles autorizaciones de métodos de control de depredadores pedimos desde nuestra asociación poder acceder a la información que las haya justificado.